SESIÓN DEL

LA JUNTA REFORESTARÁ MÁS DE 15.000 HECTÁREAS EN LAS SIERRAS DE BAZA Y HUÉTOR

Aprobada la nueva planificación de estos dos parques naturales granadinos, donde también se ampliarán las instalaciones de uso público

La Junta de Andalucía llevará a cabo programas de reforestación y regeneración en un total de 15.500 hectáreas de los parques naturales de la Sierra de Baza y de la Sierra de Huétor, ambos en la provincia de Granada. Así se recoge en los planes rectores de uso y gestión y de ordenación de los recursos naturales de estos dos espacios protegidos, aprobados hoy por el Consejo de Gobierno en sustitución de los vigentes desde 1994.

En la Sierra de Baza, el Plan Rector de Uso y Gestión fija como principal medida la reforestación de 10.000 hectáreas de montes públicos durante los ocho años de su desarrollo. En el 90% de estos terrenos se sustituirán con encinas y quejigos los actuales pinares de repoblación, mientras que el resto será reforestado con tejos, arces y pinos autóctonos. El plan también recoge un programa de ordenación del sector ganadero en los montes públicos y diversos proyectos de mejora de infraestructuras, entre los que destacan la construcción de depuradoras de aguas residuales en los pequeños núcleos de población de Bailén, Benacebada, Las Juntas, Rambla del Agua y Rejano.

En el capítulo de uso público, la Junta acometerá la mejora de los caminos forestales y ampliará la red de senderos tomando como referencia las actividades del centro de visitantes de Narváez, en Baza. Paralelamente, se llevarán a cabo iniciativas para potenciar la oferta cultural y revalorizar el legado etnológico, arquitectónico y minero de la comarca.

El segundo de los documentos aprobados para la Sierra de Baza, el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (con vigencia indefinida y evaluaciones cada diez años), establece la división del parque en tres grandes tipos de áreas.

Los territorios de mayor protección, también denominados zonas de reserva, ocupan 7.060 hectáreas (el 13,16 % de la superficie total) e incluyen como enclave destacado los Blanquizares de las solanas del Cerro de Gor, un reducto de 632 hectáreas de gran biodiversidad y singularidad botánica en las que se aplica un estricto control de actividades debido a su fragilidad. El resto de las zonas de reserva se reparte entre diversas cumbres por encima de los 1.700 metros de altitud, cubiertas de pinos albares y salgareños, sabinas, enebros, arces, tejos y prados de alta montaña: el Picón de Gor y los calares de Santa Bárbara, San Sebastián, Rapa y el Descabezado, donde se permiten actividades cinegéticas, pastoreo, recogida de setas y uso público controlado.

El segundo nivel de protección, las zonas de regulación especial, se aplicará en el 79,56% del territorio, 42.682 hectáreas de encinares, pinares de repoblación, matorral, pastizales y riberas en la que también se incluye parte de la cuenca del embalse de Gor. Además de investigación y uso público, en estas áreas se permiten aprovechamientos agrícolas, ganaderos y forestales compatibles con la conservación de la biodiversidad.

Finalmente, las zonas de regulación común, de menor valor ambiental, ocupan 3.907 hectáreas (el 7,23% del parque) y están constituidas por terrenos agrícolas (campos de cereales, olivos y almendros, principalmente); cultivos con transformaciones ganaderas en el entorno de Charches; campiñas de secano en las cercanías de la autovía A-92 y en La Atocharaza; las vegas de los ríos Balax, Bodurria, Moras y Uclías, y los núcleos habitados de Bailén, Benacebada, Los Apolos, Los Ballesteros, Los Corrales, Las Juntas, Los Olmos, Los Rodeos y Rambla del Agua.

El Parque Natural de la Sierra de Baza, al norte de la provincia de Granada, conforma un llamativo paisaje de montaña con cimas que superan los 2.000 metros en medio de las extensas planicies de la Hoya de Guadix y los Llanos del Marquesado. Sus 53.649 hectáreas se reparten entre los municipios de Baza, Caniles, Dólar, Gor y Valle del Zabalí. Extensas superficies de pinares, roquedos y matorrales sirven de hábitat a una rica comunidad de rapaces, con la presencia destacada de azores, búhos reales y águilas reales y perdiceras, así como a pequeños mamíferos como el gato montés, el tejón o la garduña.
La mayor superficie forestal corresponde a repoblaciones de pinos laricios, carrascos y negrales, acompañados de un estrato arbustivo de sabinas y enebros. En los denominados Blanquizares se localizan los enclaves botánicos de mayor valor del parque, integrados por especies únicas de tomillares. Las principales actividades económicas de la comarca se centran en la extracción de madera de pino, la ganadería lanar y porcina, los cultivos agrícolas y las industrias chacinera y de dulces.

Sierra de Huétor
En cuanto a la planificación aprobada hoy para el Parque Natural de la Sierra de Huétor, el Plan Rector de Uso y Gestión recoge como principal medida la restauración durante los próximos cuatro años de 5.515 hectáreas en las zonas de Quéntar, La Peza y Beas de Granada, afectadas por la erosión y los incendios forestales. Este proyecto incluirá trabajos de corrección hidrológica y de regeneración del matorral de la especie arenaria (exclusiva del parque), así como repoblaciones forestales con encinas, pinos negrales, tomillares y retamales.

El Plan Rector, que tendrá una vigencia de ocho años prorrogable otros ocho, prevé también una ampliación de la oferta de instalaciones de uso público, con la creación de un aula de naturaleza en la casa forestal 'Bolones', en Huétor de Santillán; la remodelación del centro de visitantes de Puerto Lobo (Víznar); la regeneración de terrenos degradados junto a la autovía A-92 para la apertura de una nueva área recreativa, y la habilitación de nuevos senderos y miradores. También se llevará a cabo la restaruación y adaptación para usos alternativos de diversas canteras abandonadas en Huétor de Santillán y Beas de Granada.

Por su parte, el Plan de Ordenación de los Recursos Naturales, con vigencia indefinida y evaluaciones cada diez años, divide el parque en tres grupos de zonas según sus valores ecológicos. Las de reserva o máxima protección representan el 3,15% del territorio y se extienden sobre 382 hectáreas en los enclaves de Cerro de los Pollos, Collado de las Víboras y Cerro del Janquillo, este último en fase de regeneración tras el incendio que lo dañó en 1993. El principal interés ecológico de estas zonas reside en la presencia de los denominados tomillares dolomíticos, con comunidades botánicas de gran singularidad.
Las zonas de regulación especial, en las que se determina un nivel intermedio de protección, ocupan 11.559 hectáreas (el 95,31% del parque) e incluyen principalmente montes públicos con pinares y encinares, además de diversos lugares de interés geológico y cría de rapaces como el Pico del Calabozo, el Puerto la Mora, los calares de La Alfagüara y el Cerro de las Higuerillas. En estas áreas se permiten actividades de uso público y aprovechamientos agropecuarios y forestales compatibles con los objetivos de conservación y de lucha contra la erosión.

Finalmente, las zonas de menor protección, denominadas de regulación común, suman 187 hectáreas (el 1,54 % del territorio) ocupadas por cultivos cerealistas de secano, olivares, pastizales y choperas.

El Parque Natural de la Sierra de Huétor, situado en el centro de la provincia de Granada y muy cercano a la capital, constituye un enclave de gran belleza paisajística entre los 1.000 y 1.900 metros de altitud, además de ofrecer las mejores panorámicas del vecino macizo de Sierra Nevada. La mayor parte de sus 12.128 hectáreas se sitúan en el término municipal de Huétor de Santillán, aunque también se extiende por los municipios de Alfacar, Beas de Granada, Cogollos de la Vega, Diezma, Nívar y Víznar.

El parque cuenta con grandes masas forestales de pinos negrales, laricios y carrascos, además de encinares, quejigales y abundante matorral de tomillares y aulagares. Asimismo, acoge una variada fauna entre la que sobresalen especies como la cabra montés, el jabalí, el zorro, la gineta, la comadreja, el gato montés, el azor, el gavilán y el águila real. Lugar de gran afluencia de visitantes por su proximidad a Granada, a sus posibilidades turísticas y recreativas añade una actividad económica que se concreta principalmente en los aprovechamientos de la madera, la caza, la ganadería y la apicultura.

Índice