Andalucía avanza en su Estrategia de Biodiversidad 2030 con alianzas público-privadas por la conservación y la economía verde

La Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente está avanzando en la formulación de la Estrategia Andaluza de Biodiversidad Horizonte 2030, un instrumento clave para preservar el patrimonio natural de Andalucía e integrarlo como activo estratégico en la economía, la planificación y el desarrollo sostenible de la comunidad autónoma. Así lo ha indicado este miércoles el director general de Política Forestal y Biodiversidad, Juan Ramón Pérez Valenzuela, durante la inauguración de la jornada ‘La gestión de la biodiversidad en Andalucía: Estrategia de colaboración público-privada’, celebrada en la sede de Endesa en Sevilla.
En el acto han participado también Juan Alfaro, secretario general del Club de Excelencia en Sostenibilidad, y Rafael Sánchez, director general de Endesa para Andalucía y Extremadura. Durante la jornada se ha presentado la Guía para Integrar la Biodiversidad en las Empresas, a cargo de Amanda del Río, directora adjunta de la Fundación Global Nature.
Pérez Valenzuela ha señalado que “la biodiversidad no se protege sólo desde las leyes o las sanciones. Se protege desde las alianzas, el conocimiento compartido y la acción conjunta”. En este sentido, ha subrayado que la Junta de Andalucía está adoptando un enfoque transversal y colaborativo para impulsar la Estrategia Andaluza de Biodiversidad (EAB 2030), con el objetivo de garantizar el uso sostenible de la diversidad biológica, mejorar sus hábitats e involucrar al sector productivo en su conservación.
Al respecto, ha explicado que la biodiversidad ya no es un concepto aislado del medio ambiente, sino un valor central para la competitividad, la reputación y la resiliencia empresarial. “Más del 50% del PIB mundial depende directamente de la naturaleza, y su pérdida está entre los tres mayores riesgos globales”, ha afirmado, al tiempo que ha puesto de relieve la necesidad de medir la huella de biodiversidad como nuevo indicador clave para las empresas, al igual que ya se mide el CO₂.
Según ha apuntado, este enfoque está plenamente alineado con los marcos regulatorios internacionales como la TNFD (Taskforce on Nature-related Financial Disclosures), la nueva directiva europea de informes de sostenibilidad (CSRD-ESRS), el reglamento sobre deforestación (EUDR) o la futura Ley de Restauración de la Naturaleza.
Durante su intervención, ha insistido en que el papel de la Junta de Andalucía es crear las condiciones necesarias para que tanto el sector público como el privado puedan proteger, restaurar, compensar o medir su huella de biodiversidad. “Nuestro compromiso es claro: acompañar, facilitar e impulsar con herramientas útiles, normativa moderna e inversión transformadora”, ha remarcado.
Futura Ley de Montes
En este contexto, ha hecho hincapié en el desarrollo de una nueva Estrategia Forestal Andaluza y en la tramitación de la futura Ley de Montes. “Queremos superar una lógica de protección pasiva para apostar por la gestión activa, la bioeconomía forestal y la valorización del monte como infraestructura ecológica”, ha indicado. Así, ha añadido que este nuevo marco permitirá promover el empleo rural, prevenir incendios y usar de forma inteligente los recursos naturales.
También ha destacado el impulso a programas específicos de conservación de flora y fauna amenazada. “En el último año hemos avanzado en la recuperación de especies clave como el águila perdicera, el alimoche o el milano real”, ha indicado. Además, ha recordado que Andalucía lidera iniciativas como los proyectos LIFE Lince, LIFE IBIS EREMITA o IBERCONEJO, así como actuaciones en humedales y en especies emblemáticas como el pinsapo (Abies pinsapo Boiss.).
Al hilo de esto último, ha querido mencionar de forma especial el esfuerzo realizado para proteger a la avifauna en redes eléctricas, “un ámbito en el que Endesa ha mostrado un compromiso ejemplar”, ha señalado. Asimismo, ha puesto en valor iniciativas de éxito en conservación impulsadas en colaboración con empresas, como el proyecto ‘Orgullosos de nuestras flores de Sierra Nevada’, liderado por Agua Lanjarón, o las acciones junto a REDEIA para trasladar su experiencia en bosques marinos a las praderas submarinas andaluzas.
En materia de energías limpias, Pérez Valenzuela ha asegurado que “la transición energética debe ir de la mano de la biodiversidad”. Por eso, ha explicado que la Junta exige a los promotores de instalaciones renovables la integración de criterios de biodiversidad desde la fase de diseño, con medidas que incluyen restauración de hábitats, pasos de fauna y control de especies invasoras.
Igualmente ha hecho referencia a las acciones desarrolladas en el ámbito marino y litoral, como el nuevo convenio con la UICN Mediterráneo para la recuperación de fondeos ecológicos en Almería y la divulgación sobre la importancia de la Posidonia oceanica como sumidero de carbono azul. En esta línea, ha reseñado que se están desarrollando medidas de colaboración con el sector pesquero para el rescate de tortugas marinas, con la participación de la Fundación Moeve.
El director general ha aplaudido la presentación de la nueva Guía para integrar la biodiversidad en las empresas, elaborada por la Fundación Global Nature y REDEIA, y ha valorado que este tipo de herramientas facilitan la transición desde la teoría hacia la acción. “No se trata solo de cumplir, sino de liderar: la biodiversidad puede y debe formar parte de la estrategia de negocio”, ha afirmado, citando ejemplos de grandes empresas y pymes que están apostando por la regeneración ambiental como parte de su modelo empresarial.
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