Durante el mes de diciembre de 2021, el Consejo Europeo y el Parlamento Europeo adoptaron nuevas normas para el intercambio de datos y consiguieron un acuerdo provisional sobre la Ley de gobernanza de Datos (DGA).
Durante el mes de diciembre de 2021, el Consejo Europeo y el Parlamento Europeo adoptaron nuevas normas para el intercambio de datos y consiguieron un acuerdo provisional sobre la Ley de gobernanza de Datos (DGA).
La Ley de Gobernanza de Datos es la primera iniciativa legislativa de la estrategia europea de datos, cuyo objetivo es convertir a la UE en líder de una sociedad impulsada por los datos. Permitiendo que estos fluyan libremente dentro de la Unión Europea y entre sectores, en beneficio de los ciudadanos, las empresas y las administraciones públicas.
El acuerdo provisional debe ser aprobado por el Consejo Europeo.
Principios de la Ley de gobernanza de datos
Promoverá la reutilización de los datos del sector público
Esta legislación de la Unión Europea facilitará el intercambio seguro y amplio de determinadas categorías de datos del sector público, complementando la Directiva de Datos Abiertos de 2019. Como, por ejemplo:
- Secretos comerciales.
- Datos personales.
- Datos protegidos por derechos de propiedad intelectual.
La protección de la privacidad y la confidencialidad es crucial en este caso, los organismos del sector público tendrán que estar técnicamente equipados para tratar estos datos de forma segura. La Comisión también creará un registro electrónico de datos del sector público, accesible a través de los puntos de información nacionales.
Crear un marco para la intermediación de datos.
Las empresas y los particulares se beneficiarán de este entorno seguro de intercambio de datos para impulsar nuevos modelos de negocio. Esto puede adoptar la forma de una plataforma digital, por ejemplo, en la que se compartan datos de forma voluntaria u obligatoria (exigida por la ley).
Esto es beneficioso para las empresas, ya que elimina el miedo al uso indebido de sus datos o a la pérdida de su ventaja competitiva.
Para los particulares, los servicios les ayudarán a tener un control total sobre sus datos y a elegir compartirlos sólo con una empresa en la que confíen a través de herramientas de gestión de la información personal como los espacios de datos personales o las carteras de datos.
Fomentar el altruismo de datos por el bien común.
Las organizaciones que recopilan datos para un interés general, como la investigación médica, pueden solicitar su inclusión en un registro nacional de organizaciones de altruismo de datos reconocidas. Esto animará a los particulares a donar datos a estas organizaciones y facilitará a las organizaciones el uso de los datos para el bien de la sociedad.