Programa Europeo de Observación y Vigilancia de la Tierra
El programa Copernicus ofrece una plataforma que publica datos abiertos de alto valor según la definición del Real Decreto-ley 24/2021
Copernicus, Programa de Observación de la Tierra de la Unión Europea, ofrece servicios de información de acceso gratuito y abierto para sus usuarios basados en datos de observación por satélite de la Tierra y en datos no espaciales procedentes de sistemas de medición terrestres, aéreos y marítimos. El objetivo es ayudar a los proveedores de servicios, las administraciones públicas y otras organizaciones internacionales a mejorar la calidad de vida de la ciudadanía europea.
Monitorizar el medio ambiente en que vivimos y sus muchos ecosistemas permitirá que los ciudadanos estemos preparados y protegidos frente a las crisis, los desastres naturales y las catástrofes causadas por el ser humano en una sociedad que se enfrenta a amenazas globales como el cambio climático, la incipiente crisis energética, el crecimiento demográfico, la potencial escasez de alimentos...
Acceso completo, abierto y gratuito
Copernicus, el mayor proveedor del mundo de datos espaciales, con una producción actual de doce terabytes al día, está coordinado y gestionado por la Comisión Europea. Y cuenta con la colaboración para su ejecución de los Estados miembros, la Agencia Espacial Europea (ESA), la Organización Europea para la Explotación de Satélites Meteorológicos (Eumetsat), el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Medio Plazo, la agencias de la Unión Europea y la empresa Mercator Océan.
La política de acceso completo, abierto y gratuito a los datos del programa Copernicus fomenta el papel como soft power de la Unión Europa en el ámbito internacional, recopilando datos que refuerzan su posición en las negociaciones sobre el clima, el medio ambiente y la biodiversidad, al mismo tiempo que refuerzan su rol en el sector de la industria espacial europea. También apoya la responsabilidad de Europa como actor global involucrado en el mantenimiento de la paz, la respuesta ante las emergencias, y la ayuda humanitaria.
Los servicios Copernicus se alimentan de las observaciones realizadas por los ‘Sentinels’, una constelación de satélites propiedad de la Unión Europea desarrollada para satisfacer las necesidades del programa y de sus usuarios que recogen efectúan una enorme cantidad de observaciones diarias. Estas se complementan con las procedentes de infraestructuras espaciales ya existentes conocidas como ‘misiones participantes’, decenas de satélites de Observación de la Tierra operados por la ESA, la EUMETSAT, los Estados miembros y por terceros países y proveedores comerciales, y con los datos de medición in situ recogidos con miles de sensores locales colocados en las orillas de los ríos, flotando en el océano, instalados en globos meteorológicos o en barcos... para generar imágenes de la Tierra extremadamente detalladas.
Plataformas de datos abiertos de Copernicus
El acceso a los datos se hace a través de cinco plataformas basadas en la nube que reciben el nombre de DIAS (siglas en inglés de ‘servicios de acceso a los datos y la información’) y que permiten a los usuarios descubrir, manipular, procesar y descargar mediante el acceso a los datos de los satélites de Copernicus, a los productos de información de sus seis servicios operativos (vigilancia atmosférica, vigilancia medioambiental marina, vigilancia terrestre, cambio climático, gestión de emergencias y seguridad) y a las herramientas basadas en la nube (de código abierto y/o de pago por uso).
Estas plataformas (creodias, sobloo, mundi web services, onda y wekeo) ofrecen, además, acceso a satélites comerciales adicionales o a conjuntos de datos no espaciales, así como servicios premium en condiciones mejoradas de asistencia y prioridad, y que los usuarios desarrollen y alojen sus propias aplicaciones en la nube, evitando la necesidad de descargar ficheros voluminosos desde varios puntos de acceso para su procesamiento local.
Áreas de actuación
La información proporcionada por Copernicus nos permite comprender mejor la Tierra como un sistema integrado y aporta valor añadido a nuestras vidas en campos como:
- Agricultura. Evaluación periódica de las áreas de cultivo y de la seguridad alimentaria, monitorización del desarrollo del cultivo a escala regional y mundial, estimación de las cosechas, etc.
- Protección civil y asistencia humanitaria. El Centro de Coordinación de la Respuesta a Emergencias usa la información geográfica para dar respuesta a los grandes desastres naturales o de origen humano y a las crisis humanitarias
- Cambio climático. Pruebas científicas de indicadores climáticos como el aumento de la temperatura o del nivel del mar, deshielo y calentamiento de los océanos
- Desarrollo y cooperación. Aplicaciones para monitorizar la agricultura, la deforestación y la desertificación, la biodiversidad en los países en desarrollo, etc.
- Energía. Apoyo a la producción renovable aportando información de variables como reservas de agua, precipitaciones y nieve acumulada; seguimiento de infraestructuras críticas como las plantas nucleares; o la protección de infraestructuras vitales como las centrales eléctricas y los gasoductos y oleoductos, etc.
- Medio Ambiente. Monitorización de la composición atmosférica, la biodiversidad, los bosques y zonas costeras, los suelos, la calidad de las aguas, el color del océano, etc.
- Salud. Control de la calidad del aire y de las aguas de baño, cartografiado de posibles brotes de epidemias o enfermedades peligrosas, etc.
- Seguros. Apoyo a la creación de modelos de riesgos, a la evaluación de daños y a la gestión de reclamaciones
- Economía azul. Vigilancia del medio marino para mejorar el conocimiento del mar y una economía sostenible en torno a él
- Turismo. Seguimiento del turismo costero y marítimo para su evaluación y planificación y para la protección del patrimonio natural y cultural
- Transporte (aéreo, terrestre y marítimo). Monitorización de las rutas de navegación o vigilancia de los vertidos de petróleo, control del tráfico marítimo; seguridad y apoyo al tráfico aéreo en caso de situaciones extremas; y evaluación de riesgos geológicos y ambientales en áreas críticas para el transporte terrestre
- Seguridad. Apoyo a acciones exteriores de la Unión Europea como la operaciones de mantenimiento de la paz, el control de sus fronteras marítimas y terrestres, etc.
- Planificación urbana y regional. Mapas detallados de las principales ciudades de la Unión Europea, cambio y uso del suelo, etc., para una planificación urbana que asegure un desarrollo sostenible y equilibrado
Para saber más sobre el programa Copernicus, el próximo 7 de julio a las 16:00 horas se celebrará un webinar donde se analizarán la aplicación y los beneficios de los datos abiertos en la preservación del patrimonio cultural.