Iniciativas europeas: ¿Qué son los Smart Villages?
Muchas zonas rurales en Europa están prisioneras en un “círculo de declive” a causa de dos tendencias que se refuerzan mutuamente: la reducción de empleos y de negocios rentables y unos servicios inadecuados y en declive. El concepto emergente de “Smart Villages” (Pueblos o Territorios Inteligentes) persigue revertir esta situación al desarrollar oportunidades que se construyan sobre fortalezas y activos existentes en las comunidades rurales.
La iniciativa sobre Smart Villages se enmarca dentro de la Cork Declaration 2.0 “Una vida mejor en el medio rural” y del documento EU Action on Smart Villages, y su importancia se plasma en posteriores declaraciones y acciones como la Smart Villages Bled Declaration for a Smarter Future of the Rural Areas in EU (Un futuro inteligente para las Zonas Rurales de la UE), o el manifiesto del RUMRA & Smart Villages Intergroup (Parlamento Europeo) Building a Sustainable Future for Rural Communities in Europe (Construyendo un Futuro Sostenible para las Comunidades Rurales en Europa).
La idea de su relevancia para las estrategias de la UE la da el hecho de que se ha introducido un Indicador de Smart Villages en los Planes Estratégicos de la propuesta de la PAC post-2020, como es el de la “Población rural cubierta por una estrategia de Smart Villages”.
Aunque la denominación estaba ya vigente es a partir del Proyecto Piloto sobre Smart Villages eco-sociales (2017-2018), realizado a instancias del Parlamento Europeo, cuando se ha clarificado de manera definitiva su definición. Los Smart Villages son comunidades en las zonas rurales que utilizan soluciones innovadoras para aumentar su resiliencia y construir a partir de fortalezas locales y oportunidades. Se apoyan en un enfoque participativo para desarrollar e implementar su estrategia con miras a la mejora de sus condiciones económicas, sociales y/o medioambientales, en particular movilizando las soluciones que aportan las tecnologías digitales.
La iniciación e implementación de las estrategias de Smart Villages se puede basar en iniciativas anteriores y comprenden un amplio rango de servicios diferentes, proyectos y actividades, incluyendo aparcamientos inteligentes, infraestructura de movilidad y transporte, inversiones en edificios eficientes en energía, etc.
Aunque existe gran diversidad de contextos locales y de situaciones para definir las condiciones en que una población o territorio se puede convertir en inteligente, se han identificado tres condiciones básicas esenciales para el desarrollo y la implementación de estrategias de Smart Villages: establecimiento de buenas estructuras de gobernanza, la implicación activa de sus habitantes y que el objetivo de las estrategias sea lo más claro posible.
Sin embargo, y aun estando contemplado como indicador en los Planes Estratégicos de la propuesta de la PAC post-2020, no se ha previsto un instrumento específico de apoyo a las Smart Villages, por lo que los Estados Miembros han de utilizar la batería de instrumentos financieros existentes, europeos, nacionales o privados.
Para impulsar los Smart Villages desde 2017 y hasta julio de 2020 está funcionando un subgrupo de igual nombre dentro del grupo temático Zonas Rurales Inteligentes y Competitivas de la ENRD (European Network of Rura Development –Red Europea de Desarrollo Rural-). Este subgrupo, que constituye la plataforma para las partes interesadas en la UE, se ha desarrollado con el fin de revisar muchas de las iniciativas locales que se están llevando a cabo actualmente y determinar la política de apoyo que ellas necesitan en las distintas fases de su evolución y su implementación. Esta iniciativa se ha reforzado con el Portal sobre Pueblos Inteligentes y en el futuro está prevista además una red de intercambios (Smart Villages Network).
Así mismo y para poner en práctica el concepto de Smart Villages e ir recopilando el conocimiento necesario mediante la práctica, el pasado diciembre arrancó el proyecto “Acción Preparatoria sobre Zonas Rurales Inteligentes en el siglo 21” (Smart Rural 21), financiado por la Comisión Europea (DG-AGRI), de dos años y medio de duración. Con el objetivo general de promocionar y fomentar soluciones inteligentes y estrategias y apoyar las futuras intervenciones en programas en esta línea, el proyecto prevé entre otras acciones aportar herramientas así como una base de datos de soluciones. Este proyecto trabaja con 17 pueblos de Irlanda, Francia, República Checa, Grecia y Finlandia, estando prevista una incorporación de 12 pueblos más a partir de junio de este año.