

Autoría: Marta Junqué Surià, Marc Martorell Escofet
Publica: Time Use Initiative
Fecha: abril 2025
Contribución al Observatorio Global sobre Democracia Local y Descentralización (GOLD) VII sobre las Economías de la Igualdad y el Cuidado.
El documento aborda la organización del tiempo en las ciudades y su impacto en la igualdad, la salud pública y el bienestar, proponiendo políticas para mejorar el uso del tiempo en la sociedad.
La organización del tiempo en las sociedades modernas es un problema colectivo que afecta a todos, independientemente de género, edad o condición. La división tradicional de la jornada laboral en tres partes iguales (trabajo, descanso y ocio) ya no se ajusta a las necesidades actuales. La división del tiempo se originó en la Revolución Industrial, estableciendo un modelo de "triángulo de ocho horas". Este modelo no considera el tiempo necesario para el cuidado y la reproducción social, que recae principalmente en las mujeres. Desde el siglo XXI, se han comenzado a implementar políticas de tiempo a nivel local y regional.
La pobreza de tiempo afecta desproporcionadamente a las mujeres, quienes dedican más tiempo a trabajos de cuidado no remunerados. Esto contribuye a una creciente desigualdad en el acceso al bienestar. La pobreza de tiempo se define como el tiempo disponible después de deducir el tiempo dedicado al trabajo remunerado y al cuidado. En España, se estima que el 20% de la población enfrenta pobreza de tiempo, afectando hasta el 35% de las mujeres con responsabilidades de cuidado.
La aceleración de los ritmos urbanos interfiere con los ciclos naturales, afectando la sostenibilidad ambiental. Las infraestructuras urbanas contribuyen a la degradación de los recursos naturales. Las ciudades generan superficies impermeables que alteran los ciclos de regeneración del agua. La dependencia de la movilidad urbana, especialmente en automóviles, contribuye a la insatisfacción y a la contaminación. El 58% de los europeos están insatisfechos con la fluidez del tráfico durante las horas pico.
La organización del tiempo afecta a los ritmos circadianos, lo que puede provocar problemas de salud física y mental. La privación del sueño es un problema estructural que impacta la salud pública y la economía. La exposición constante a la luz artificial interfiere con los ritmos circadianos, aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares y trastornos de ansiedad. La privación del sueño se asocia con pérdidas económicas significativas, afectando el PIB nacional. La falta de sueño puede aumentar el riesgo de accidentes laborales y problemas cognitivos.
La forma en que se organiza el tiempo influye en la productividad y el rendimiento económico. La transición hacia economías de 24 horas ha creado desigualdades en las horas de trabajo. Algunos trabajadores enfrentan semanas laborales de más de 48 horas, mientras que otros trabajan menos de 35 horas. Trabajar más de 55 horas a la semana aumenta el riesgo de accidentes laborales y problemas de salud. La implementación de horarios racionales puede aumentar la productividad entre un 20% y un 40%.
Las políticas de tiempo son necesarias para abordar la desigualdad y mejorar el bienestar social. Estas políticas buscan equilibrar el tiempo dedicado al trabajo, cuidado, descanso y ocio. Se proponen políticas como la visualización del tiempo de cuidado y la urbanización de proximidad para mejorar la calidad de vida. La creación de oficinas de tiempo y la realización de encuestas de uso del tiempo son esenciales para la toma de decisiones basadas en evidencia. La colaboración entre gobiernos locales y nacionales es crucial para implementar estas políticas de manera efectiva.