

La Ley 22/2007, de 18 de diciembre, de Farmacia de Andalucía, constituye el marco normativo de referencia en materia de Farmacia en el ámbito de Andalucía. En ella se regula la ordenación de los servicios y establecimientos farmacéuticos, así como los derechos y obligaciones que se derivan de la atención farmacéutica que se presta a la población, fomentando su uso racional y propiciando la mejora de los niveles de salud para la colectividad.