Los Centros de Tratamiento Ambulatorios constituyen el primer nivel de la red pública de atención a las adicciones, realizándose a través de ellos las derivaciones a los recursos de segundo nivel.
Son centros especializados en la atención a las personas con problemas de adicciones, de carácter ambulatorio (es decir de consultas externas mediante cita previa), donde se realizan actuaciones de prevención y asistencia sanitaria que incluye diagnóstico, tratamiento, desintoxicación, deshabituación, además de rehabilitación e incorporación social.
Cuentan con un equipo de profesionales que proporcionan tratamiento a las adicciones en sus diversas fases o pueden, cuando así se precise, derivar al paciente a otro recurso, incluso fuera de su provincia, perteneciente a la Red Pública de Atención a las Adicciones de Andalucía (RPAA).
Los CTA de cada provincia son coordinados por el Centro Provincial de Drogodependencias, que constituye el referente de las actuaciones en materia de adicciones en el ámbito provincial. Estos recursos representan el primer nivel de acceso a la Red y dependiendo de su entorno de actuación pueden ser: Centros Provinciales, Comarcales o Municipales en función de su ámbito territorial de competencias.
En la Red de atención a las adicciones la titularidad de los CTA puede ser pública o privada. En el caso de ser privados la actividad debe ser concertada previamente (acordada a través de un contrato que permita su funcionamiento como centro público) por lo que nos referimos a ellos como Centros Privados Concertados. Ahora bien, todos los centros que pertenecen a la Red, independientemente de su titularidad, funcionan como públicos y se rigen por los mismos principios y metodología de actuación.
Los Centros de Tratamiento Ambulatorio de Atención Preferente son de dos tipos: los dedicados al Juego Patológico y los que atienden a personas con problemas de Alcoholismo. Los primeros son centros especializados en la atención al juego patológico en régimen de consulta programada. Su función principal es la prevención, orientación, deshabituación, rehabilitación e incorporación social de las personas afectadas por el juego patológico de forma ambulatoria. Los segundos funcionan como cualquier otro CTA pero con atención preferente a las personas con problema de alcoholismo.