La consejera de Salud anima a participar en los programas de cribados para la detección precoz de enfermedades

La detección precoz es una de las herramientas más efectivas para prevenir enfermedades, mejorar la calidad de vida y garantizar la salud pública. Así lo ha destacado Rocío Hernández, consejera de Salud y Consumo, durante su comparecencia en la Comisión de Salud del Parlamento de Andalucía para detallar los avances en los programas de cribado poblacional del Sistema Sanitario Público de Andalucía. “No hay mejor forma de ganar en salud en el futuro que fortaleciendo la prevención en el presente”, ha afirmado Hernández. 

Para ello Andalucía cuenta con tres grandes líneas de programas de cribado poblacional: prenatal, neonatal y oncológico. Estas iniciativas, según ha explicado Hernández, son esenciales para identificar patologías de forma temprana, minimizar discapacidades y reducir tasas de mortalidad. “Un sistema eficiente y bien planificado de cribado es fundamental para alcanzar una salud óptima en la ciudadanía”, ha destacado.  

Durante su intervención, la consejera ha explicado que el programa de cribado prenatal se centra en la detección de anomalías cromosómicas y enfermedades infecciosas. Desde el sistema público, se ofrece de manera universal a todas las mujeres embarazadas, siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Sanidad y adaptando los protocolos a las directrices de la Consejería. En el ámbito cromosómico, el programa incluye pruebas específicas para detectar trisomías en los cromosomas 21, 18 y 13, responsables de afecciones como los síndromes de Down, Edwards y Patau. Hernández ha dicho también que Andalucía está a la espera de que la Comisión Autonómica de Cribados apruebe el Programa Andaluz para el Cribado de Anomalías Congénitas y Complicaciones del Embarazo (PACACCE), previsto para diciembre, lo que supondrá un avance significativo en esta área.  

Por otro lado, el cribado de enfermedades infecciosas incluye pruebas para sífilis, VIH, hepatitis B y estreptococo del grupo B, además de enfermedades como rubeola o varicela en embarazadas sin evidencia de vacunación.  

En cuanto a los cribados prenatales, Hernández ha afirmado que el mayor reto, tanto a nivel autonómico como a nivel estatal, es “la creación de un sistema de información global adecuado que permita el registro y exportación de datos de manera fiable y homogénea”.

La consejera ha abordado también el cribado neonatal, recordando que en Andalucía todos los recién nacidos, independientemente de si nacen en centros públicos o privados, son sometidos a cribados neonatales entre las 36 y 48 horas de vida. Este programa incluye la detección de enfermedades endocrino-metabólicas y de hipoacusia.  

La denominada prueba del talón permite identificar 34 patologías metabólicas, superando ampliamente las 12 contempladas por el Ministerio de Sanidad. Además, se prevé la incorporación de cuatro nuevas enfermedades en 2025, lo que elevará el total a 38. "Estamos trabajando para que esta ampliación se implemente en el primer semestre del próximo año", ha asegurado Hernández.  

En cuanto a la hipoacusia congénita, la Junta ha desarrollado un protocolo específico que abarca desde la detección hasta el tratamiento y seguimiento. Además, está en marcha un sistema de información que integrará los datos en las historias clínicas digitales, así como un programa de formación para profesionales, que comenzará en 2025.  

Cribados oncológicos

Los programas de cribado oncológico abarcan la detección de cáncer de colon, cérvix y mama. Según ha detallado la consejera durante su intervención, la prevención en estos casos “no solo salva vidas, sino que también reduce el impacto del tratamiento en los pacientes”.  

En lo que llevamos de 2024, 253.154 pacientes aceptaron la invitación a participar en cribado de cáncer colorrectal, de los que han participado un total de 160.533, alcanzando a un 63,38% de la población diana. Aunque esta cifra es significativa, Hernández ha subrayado la necesidad de seguir fomentando la participación ciudadana.  

En lo que respecta al cribado del cáncer de cuello de útero, Hernández ha destacado que este ha sido implementado de forma gradual en toda la comunidad, y que alcanzará al 100% de la población objetivo antes del 1 de julio 2029. Hasta septiembre, se enviaron 10.000 invitaciones a mujeres en los tramos de edad de 25-29 y 60-65 años, lo que refleja el compromiso de la Junta con este programa. 

En cuanto al cáncer de mama, Hernández ha hecho hincapié en los esfuerzos por ampliar la población diana. Desde 2023, el programa incluye a mujeres de hasta 71 años y está trabajando para incorporar a las de entre 47 y 49 años. "Nuestro objetivo es ampliar progresivamente la cobertura", ha asegurado. Este esfuerzo se ve respaldado por la adquisición de 45 nuevos mamógrafos con tecnología de tomosíntesis, adecuados para mujeres menores de 50 años.  

Desde el 1 de enero hasta el 30 de octubre de este año, el Servicio Andaluz de Salud ha realizado 328.929 mamografías dentro del Programa de Detección Precoz del Cáncer de Mama, que han permitido la detección de 1.957 casos de cáncer en los diez primeros meses de 2024. Además, la Junta ha destinado 50 millones de euros en los últimos tres años a la Estrategia de Cáncer en Andalucía, lo que refuerza su liderazgo en este ámbito y ha posibilitado un incremento en la cartera de cribados poblacionales para mejorar el diagnóstico precoz de esta patología.

A pesar de los avances, Hernández ha recalcado la importancia de la colaboración ciudadana: “Hago un llamamiento a todas las mujeres andaluzas para que acudan a las citas para mamografías. La detección precoz es la mejor arma para tratar el cáncer, ganar en supervivencia y realizar intervenciones menos invasivas”.