La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía refuerza su apuesta por la investigación biomédica con el fin de mejorar la calidad asistencial y la vida de los pacientes andaluces. Según ha señalado en la Comisión de Salud Rocío Hernández, consejera de Salud y Consumo, “apostamos por la investigación en biomedicina para que los profesionales sanitarios puedan desarrollar sus proyectos y estudios de investigación, los cuales tienen un posterior impacto positivo en la calidad de vida de los pacientes”.
Este compromiso se refleja en la última convocatoria de refuerzo de la actividad investigadora, gestionada por el Servicio Andaluz de Salud (SAS) en colaboración con la Fundación Progreso y Salud, que ha experimentado un notable incremento en el número de solicitudes, consolidando el interés de los profesionales por avanzar en esta área clave.
Una de las áreas destacadas de esta convocatoria es la llamada Acción A, dedicada a reforzar la actividad investigadora anual en las unidades clínicas. Este año, se han recibido 71 solicitudes, 13 más que la media anual del último cuatrienio. Este programa permite que los profesionales sanitarios con experiencia investigadora puedan liberarse de su actividad asistencial, contratando personal sustituto para concentrarse en sus proyectos de investigación.
Por su parte, las Acciones B y C han registrado un total de 23 solicitudes. “La acción B está enfocada a la incorporación de profesionales asistenciales con trayectoria y formación específica reglada en investigación que hayan finalizado (o estén cursando el último año) los programas Río Hortega o Juan Rodés del Instituto de Salud Carlos III, así como otros equivalentes, e incluye un periodo de contratación que abarca inicialmente tres años”, ha explicado Hernández. Estos contratos permiten compaginar tareas asistenciales, investigadoras y docentes dentro de las unidades en las que se integren.
La Acción C, o Programa Nicolás Monardes, busca captar talento senior para aportar estabilidad y continuidad científica a investigadores que han concluido otros programas posdoctorales. Esta acción cuenta con una línea de financiación de unos 245.000 euros para cuatro años, por cada contrato que se sufrague.
Como novedad, la convocatoria de 2024 incluye dos nuevas líneas, Investiga-C e Investiga-C+, cofinanciadas con fondos propios de la Red de Fundaciones gestoras de I+i del Sistema Sanitario Público de Andalucía. Según Hernández, “estas dos líneas han recibido 39 y cinco solicitudes respectivamente y están encaminadas a la selección competitiva”. Investiga-C está dirigida a profesionales en centros del SAS que hayan completado la formación sanitaria especializada en Ciencias de la Salud, mientras que Investiga-C+ se enfoca en doctores que ya han iniciado su formación en investigación.
“Todas estas convocatorias forman parte de las acciones planificadas por el SAS, como parte fundamental de la Estrategia de I+D+i aprobada por esta Consejería, para impulsar el desarrollo de la I+i en nuestra tierra”, ha subrayado la consejera.
Hernández ha concluido su intervención destacando el impacto positivo de estas iniciativas: “Todas tienen un único objetivo, que es, a su vez, uno de los mayores desafíos de la investigación biomédica: facilitar la conexión entre los nuevos conocimientos y sus efectos en la salud de los pacientes andaluces”.
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