Información general
- Salud y Consumo
Desde la Consejería de Salud y Consumo, a través de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, con la dirección del Plan, la colaboración del Servicio Andaluz de Salud, y el apoyo metodológico de la Escuela Andaluza de Salud Pública, se ha elaborado el presente Plan Estratégico Andaluz de Abordaje de las Hepatitis Víricas (PEAHEP). Este Plan constituye una nueva iniciativa, pionera en España, para impulsar la concienciación y estimular las políticas activas en la gestión de las hepatitis víricas A, B, C, D y E. El PEAHEP se presenta como una iniciativa integral que tiene como objetivos principales la prevención, diagnóstico, el tratamiento, la protección y control de las hepatitis víricas en Andalucía.
El Plan se alinea con los objetivos globales establecidos por la OMS y con las directrices nacionales del Ministerio de Sanidad de España, que buscan eliminar las hepatitis víricas para el año 2030. Este esfuerzo colectivo es fundamental para mejorar la salud de la población andaluza y reducir las desigualdades en salud.
Y es que, a nivel mundial, las hepatitis víricas representan una carga significativa para la salud pública. Según el informe global de hepatitis víricas de 2024 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que 254 millones de personas viven con hepatitis B y 50 millones con hepatitis C. Estas infecciones causan aproximadamente 3.500 muertes diarias, y la mortalidad está en aumento. La OMS ha establecido metas ambiciosas para eliminar las hepatitis víricas desde salud pública para el año 2030, lo que incluye la reducción del 90% en las nuevas infecciones y del 65% en la mortalidad.
Los Objetivos del Plan son los siguientes:
a) Reducción de la Incidencia: Implementar estrategias de prevención y promoción de la salud, dirigidas a reducir la transmisión de las hepatitis víricas a través de la vacunación, la educación sanitaria y la mejora de las condiciones de vida.
b) Mejora del Diagnóstico: Potenciar el diagnóstico precoz de las hepatitis víricas, especialmente en los grupos de riesgo, mediante la integración de protocolos específicos en la atención primaria y especializada.
c) Acceso Universal al Tratamiento: Impulsar que todas las personas diagnosticadas con hepatitis víricas tengan acceso a los tratamientos más avanzados, asegurando la equidad en la atención sanitaria.
d) Fortalecimiento de la Vigilancia Epidemiológica: Optimizar los sistemas de vigilancia para monitorizar la incidencia y prevalencia de las hepatitis víricas, permitiendo una respuesta rápida y eficaz ante brotes y nuevas infecciones.
e) Formación y Capacitación de Profesionales: Desarrollar programas de formación continuada para los profesionales de la salud, asegurando que estén actualizados con las mejores prácticas en el manejo y tratamiento de las hepatitis víricas.
Además se han definido cinco líneas estratégicas generales sobre las que se articula el Plan, que son esenciales para el correcto desarrollo e implantación del Plan en Andalucía:
a) Línea estratégica 1. Promoción de la Salud.
b) Línea estratégica 2. Prevención y Diagnóstico.
c) Línea estratégica 3. Protección VHA y VHE.
d) Línea estratégica 4. Tratamiento.
e) Línea estratégica 5. Vigilancia Epidemiológica y Respuesta en Salud Pública.
Junto a estas líneas estratégicas se han desarrollado son líneas transversales:
a) Línea transversal A. Formación de Profesionales.
b) Línea transversal B. Investigación e Innovación.
A partir de cada línea, se han definido una serie de objetivos, se han identificado los colectivos de alta incidencia de hepatitis víricas priorizados, y se han descrito las acciones necesarias para llevar a cabo los objetivos, así como indicadores para medirlas.
Documentos del plan
Evaluación del plan
La evaluación de un plan implica un proceso sistemático y riguroso que busca determinar la eficacia y eficiencia de las acciones implementadas. Los objetivos se buscan alcanzar a través de la implementación de las acciones detalladas en el Plan, las cuales podrán ser evaluadas posteriormente mediante los correspondientes indicadores de realización, que han sido definidos específicamente para este fin.
Estos indicadores forman el sistema de evaluación y seguimiento que permitirá medir el nivel de cumplimiento de los objetivos. Los datos para estos indicadores se obtendrán de sistemas de información ya existentes o mediante la implementación de los mecanismos necesarios previstos en el propio Plan. La evaluación proporciona información crítica para la toma de decisiones, permitiendo ajustes y mejoras continuas en la ejecución del plan para maximizar sus impactos positivos y asegurar el logro de los resultados esperados.