La consejera de Igualdad y Políticas Sociales, María José Sánchez Rubio, ha calificado de “muy enriquecedora” la colaboración entre Andalucía y Marruecos con el objetivo de impulsar una nueva cultura de la infancia en la que los niños, niñas y adolescentes disfruten del reconocimiento social que se merecen. Así lo ha indicado en el acto de apertura en Granada de una Jornada de apoyo a la política de protección de menores en el Norte de Marruecos, con motivo de la visita de técnicos de la administración marroquí para conocer la experiencia andaluza en esta materia.
La delegación de Entraide Nationale, órgano público encargado de la protección social y el desarrollo de las personas en situación de vulnerabilidad, está encabezada por su director, Abdelmonnime El Madani, e integrada por 19 técnicos y responsables de la administración marroquí en la región septentrional de Tánger-Tetuán-Alhucemas, entre coordinadores de zona, jefes de servicio, directores de centro, y gestoras de acción social. Durante tres días conocerán los recursos de la Red de Centros de Protección de Menores de la Junta en las provincias de Granada, Sevilla y Huelva.
En su intervención, ha destacado también la importancia de “proteger de forma especial” los derechos de la infancia porque es el sector de la población “más vulnerable de la sociedad”. Unos objetivos que contempla el proyecto de la Junta, que tiene como acciones futuras la formación, organización y elaboración de herramientas de capacitación técnica, de acuerdo a lo solicitado por la Entraide Nationale.
En el acto de apertura de la Jornada, que ha tenido lugar en el Centro de Protección de Menores Bermúdez de Castro de la capital granadina, la consejera Sánchez Rubio y el director de la Entraide Nationale han estado acompañados, por parte española, del director de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AACID), Néstor Fernández Rodríguez, y la subdirectora general de Infancia y Familias, Josefa Vázquez Murillo; y, por parte marroquí, de Assia Missoum, jefa de división de Centros de Acogida.
Sánchez Rubio ha destacado y expresado su satisfacción por el “reto ilusionante y apasionante” del Proyecto de Apoyo a la Política de Protección de Menores en el norte de Marruecos, que desarrolla la Junta en el área de cooperación al desarrollo; una iniciativa que “invita y empuja a superar las fronteras, además de comprometernos” a propiciar que los niños y niñas sean felices y puedan llevar a cabo sus proyectos de vida, en igualdad de oportunidades, a ambos lados del Estrecho.
Ha recordado también la dilatada trayectoria de cooperación técnica y económica que existe entre la consejería de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía y la secretaría de Estado para la Familia, la Infancia y las Personas con Discapacidad del Reino de Marruecos, cuyos primeros contactos se remontan a 1996 y han experimentado desde entonces una participación continuada tanto desde la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional como desde la Dirección General de Infancia y Familia y sus órganos dependientes: el Observatorio de la Infancia de Andalucía y la Agencia Andaluza de Servicios Sociales.
La Entraide Nationale
Por su parte, el director de la Entraide Nationale ha destacado la importancia para Marruecos de la cooperación con Andalucía, dada la similitud existente entre ambos territorios en el punto de partida de implementación de estas políticas para la infancia, los protocolos sobre menores y el doble modelo de gestión de los centros, regidos tanto por ONG como por la administración.
Esta colaboración constante se ha plasmado en el respaldo a las distintas fases del ‘Programa de Apoyo a la Política de Protección de Menores’ de la Entraide Nationale, en 2007 (Fase I), 2008 (Fase II) y 2013 (Fase III), con una dotación de más de 5 millones de euros hasta la fecha.
Mediante este programa se han llevado a cabo acciones de mejora de las condiciones de vida de los menores en dificultad en todos las regiones del norte de Marruecos, mediante la rehabilitación y/o reconstrucción de un total de 17 Centros de Menores; además de su equipamiento, la formación y capacitación de sus recursos humanos, y la elaboración de herramientas socioeducativas.
A modo de cierre del encuentro, la representante del Gobierno andaluz ha insistido en la obligación de los poderes públicos de “ser capaces de ofrecer a los menores las oportunidades necesarias para que desarrollen sus capacidades y su potencial de vida”, promoviendo sus derechos, bienestar y educación.
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