La Junta pide al Gobierno que el sector orujero pueda beneficiarse de las ayudas estatales por el alza de los precios del gas natural en 2022

El Gobierno andaluz ha solicitado al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo que contemple las particularidades de la actividad de secado de alperujo para la fabricación de aceite de orujo en la futura orden ministerial que recogerá los requisitos de la línea de ayudas para la compensación de los costes adicionales debidos al aumento excepcional de los precios del gas natural durante 2022, que se contempló en el Real Decreto-ley 20/2022, de 27 de diciembre, de medidas de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania.

El Consejo de Gobierno ha tomado hoy conocimiento de esta reclamación que ha trasladado la Consejería de Política Industrial y Energía al Gobierno central, con la que se pretende que el conjunto de la industria orujera, que es intensiva en el consumo de gas natural para desarrollar su actividad, tenga acceso a estas ayudas.

La Junta viene trabajando desde el pasado verano de la mano del sector, y por ello conoce bien los elementos que hoy día están condicionando la actividad de secado de alperujo. En este sentido, aunque la actividad de fabricación de aceite de orujo ha sido incluida entre las destinatarias de las ayudas, existen especificidades que conviene que sean tenidas en cuenta en las bases reguladoras de la línea de ayudas que el Ministerio acometerá.

Una de ellas hace referencia a que el consumo de gas pueda tener lugar en las instalaciones de cogeneración, considerando que, si bien en estas se produce simultáneamente energía eléctrica y térmica, la producción de esta energía eléctrica no desvirtúa la principal finalidad del gas para generar la energía térmica empleada en el secado del alperujo, y por tanto se aborda el consumo de gas para una actividad industrial, objeto de la línea de ayudas prevista.

Otra particularidad es que hay empresas que engloban todo el proceso, desde el secado a la producción del aceite de orujo, que no pueden repercutir el incremento del gas en el precio de mercado del aceite, y en otras ocasiones son terceras empresas las que operan las instalaciones de cogeneración e igualmente no pueden repercutir el incremento del precio del gas sobre las empresas receptoras de su servicio energético.

Por otra parte, cabe recordar que el 16 de noviembre de 2022 el Consejo de Gobierno acordó instar al Gobierno de España a modificar el periodo de revisión de las retribuciones a la operación en base a los precios reales de gas, CO₂, y pool de electricidad de seis meses a un mes para las plantas orujeras con cogeneración, así como a articular ayudas para garantizar la continuidad de la actividad de las empresas industriales afectadas por el aumento de costes de la energía derivados de la guerra en Ucrania.

El pasado 14 de diciembre se publicó en el Boletín Oficial del Estado la Orden del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico que actualiza los parámetros retributivos para 2022 sin que se haya modificado dicho periodo de revisión de las retribuciones como reclamaba Andalucía.

Sin embargo, actualmente el Ministerio está tramitando la propuesta de “Orden por la que se actualizan los parámetros retributivos de las instalaciones tipo aplicables a determinadas instalaciones de producción de energía eléctrica a partir de fuentes de energía renovables, cogeneración y residuos, a efectos de su aplicación al semiperiodo regulatorio que tiene su inicio el 1 de enero de 2023”. Por esta razón, desde la Junta de Andalucía se ha solicitado de nuevo que se tomen las medidas oportunas para garantizar una rentabilidad razonable de forma que se asegure la viabilidad de la actividad de la industria orujera, que resulta fundamental para el sector oleícola.

Relevancia del sector orujero

El sector del aceite de orujo de oliva es vital, dado que en las orujeras se valoriza todo el orujo graso húmedo producido en las almazaras durante la producción del aceite de oliva. Por cada 100 kilogramos de aceituna que entran en una almazara, solo 20 kilogramos se transforman en aceite de oliva virgen mientras que los otros 80 kilogramos son orujo graso húmedo. La producción media de aceite de oliva de España es de unos 1,4 millones de toneladas, lo que genera unos 7 millones de toneladas de orujo graso húmedo. De esta cantidad de orujo graso húmedo, se procesa bajo cogeneración el 40% del total, unos 2,8 millones de toneladas, prácticamente la totalidad en Andalucía.

La industria de extracción de aceite de orujo ha modernizado sus instalaciones en las últimas décadas, sustituyendo en algunos casos calderas multicombustible por instalaciones de cogeneración de alta eficiencia alimentadas por gas natural para la transformación de los procesos de secado de alpechín, dando respuesta a las exigencias sociales de desarrollar la actividad industrial de una forma sostenible y eficiente, pero que supone hoy en día una gran exposición a los precios del gas.