Un operario en una fábrica.
El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento de la puesta en marcha de seis nuevos planes de cadena de valor CRECE Industria orientados a reforzar sectores estratégicos para Andalucía, como son las industrias de la energía, frío y climatización; del plástico; la farmacéutica; del agua; de la automoción y para la digitalización.
Así, a través de la Consejería de Industria, Energía y Minas, el Gobierno andaluz destinará 70 millones de euros de recursos públicos en el despliegue de unas 200 medidas para fortalecer los ecosistemas industriales en torno a estos sectores de actividad en Andalucía, en un conjunto de actuaciones que pretenden movilizar inversiones privadas por valor de 300 millones de euros.
Estos seis planes se enmarcan bajo el paraguas del plan CRECE Industria, que persigue el desarrollo de las principales cadenas de valor de bienes y servicios industriales andaluzas para aterrizar medidas de fomento e impulso en los diferentes sectores industriales, fijando valor a los territorios. Uno de los objetivos que se marca es situar a Andalucía como una región diferencial para la industria, con un marco institucional y social comprometido con el sector industrial.
En Andalucía, más de 19.000 empresas y establecimientos industriales desarrollan su actividad en estos seis sectores y dan empleo a más de 116.000 personas, de ahí el carácter estratégico de los mismos y la importancia de fortalecer su estructura industrial por parte del Gobierno andaluz. Así, un total de 42 entidades entre asociaciones patronales, profesionales, centros de investigación y universidades han participado en el diseño de las medidas recogidas en estos planes, que han sido acordados con la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), UGT y CCOO.
En la industria de la energía, frío y climatización, con un total de 8.822 empresas en la región de las que dependen 69.100 trabajadores, Andalucía mantiene el liderazgo en varios ámbitos. Así, lidera el frío comercial en el canal HORECA (hoteles, restauración y catering) con una cuota de mercado nacional del 75%. Asimismo, encabeza la fabricación de equipos de energía solar térmica (40% de cuota), mientras que el 70% de las empresas del sector energético centran su actividad en tareas de montaje y mantenimiento.
El plan de cadena de valor CRECE Industria de la energía, frío y climatización contempla 32 iniciativas y cuenta con un presupuesto de 20 millones de euros con los que se prevé movilizar inversión privada por valor de 77 millones. Siete entidades han participado en su diseño. Se plantean acciones clave para impulsar la hibridación de tecnologías, un proyecto de colaboración Net Zero, difusión de las tecnologías andaluzas, participación en alianzas y partenariados previstos en el plan industrial europeo Green Deal y RePowerEU, así como proyectos de colaboración en sectores estratégicos.
En el caso del plan de cadena de valor CRECE de la industria sostenible del plástico, se recoge la puesta en marcha de 33 iniciativas consensuadas con once asociaciones y centros tecnológicos con el fin de movilizar inversiones por valor de 27 millones de euros. La aportación pública se sitúa en cinco millones de euros. Andalucía cuenta con una larga tradición industrial en el ámbito del plástico, tanto en su producción como en su uso en diferentes sectores como el agrícola, agroalimentario o la automoción. La región, que registra una facturación superior a los 1.300 millones de euros, contabiliza 530 establecimientos industriales y da empleo a cerca de 5.900 personas. Entre las actuaciones a desarrollar se encuentra la medición, seguimiento y certificación de la huella ambiental de productos y organizaciones; certificaciones sectoriales; difusión de buenas prácticas sobre el plástico reciclado; encuentros comerciales con otros sectores de especial interés; y el análisis de soluciones digitales para abordar retos industriales.
Industria farmacéutica
Dotado con 10 millones de euros para generar 44 millones en inversiones, el plan CRECE de la industria farmacéutica se marca entre sus objetivos identificar proyectos industriales que completen la cadena de suministro, así como fomentar la cooperación entre esta industria y la biotecnológica. Para ello se desplegarán 36 iniciativas. Con la participación de cinco entidades y plataformas tecnológicas, Andalucía quiere sacar el máximo potencial a las plantas de fabricación de medicamentos para uso humano, uso animal, de principios activos y medicamentos biológicos que están implantadas en su territorio, donde se contabilizan 179 establecimientos industriales y un empleo asociado superior a las 1.300 personas.
Respecto al plan de la industria del agua, marcado por el contexto actual de sequía prolongada, el desafío de la optimización del recurso hídrico es más estratégico si cabe. Partiendo de esa premisa, este plan CRECE se marca 30 iniciativas enfocadas al desarrollo tecnológico para mejorar el uso del agua en la industria avanzando en el concepto de vertido cero, la renovación y mejora de equipamientos e instalaciones, así como el impulso de un catálogo de soluciones tecnológicas andaluzas.
Para la puesta en marcha de estas actuaciones, en las que se quiere poner en valor la experiencia de Andalucía en la preservación de los recursos hídricos y su especialización en la gestión del ciclo integral del agua, el plan cuenta con un presupuesto de cinco millones de euros con el que se espera movilizar 27 millones en inversiones. Cuatro han sido las entidades sectoriales que han participado en su elaboración.
El sector de la automoción se divide en Andalucía en un sector fabril, en el que desarrollan su actividad 251 establecimientos y cuenta con más de 7.100 trabajadores, y el sector del mantenimiento y reparación del automóvil, que da empleo a 22.000 personas a través de casi 10.000 talleres. El plan CRECE Industria de la automoción contempla 33 iniciativas diseñadas y acordadas de forma conjunta con ocho asociaciones y entidades que, con 10 millones de financiación pública, prevén movilizar 44 millones de euros en inversiones. Entre las medidas previstas se encuentra la participación en proyectos europeos como la Alianza de Regiones con Industria de Automoción ARA, aplicaciones de mejoras en digitalización y el impulso a FP dual y acreditación y reciclaje profesional hacia nuevas formas de movilidad.
Industria de la digitalización
Con un presupuesto de 20 millones de euros, este plan de cadena de valor pretende generar un ecosistema industrial para la digitalización, máxime en el actual contexto, en el que Europa quiere ganar soberanía estratégica en ámbitos como los chips o semiconductores y las materias primas críticas. Diseñado de la mano de siete asociaciones y clústers tecnológicos, destacando el papel catalizador de Málaga Tech Park, pretende movilizar inversiones por valor de 77 millones a través de la puesta en marcha de 34 iniciativas, entre las que destaca el impulso de una red de empresas de la Inteligencia Artificial y de Ciberseguridad o la difusión de la oferta tecnológica andaluza tanto en el sector privado como en el sector público, con el fin último de abrir nichos de mercado para el despliegue de soluciones digitales en sectores estratégicos de Andalucía, especialmente en los de alta tecnología, como el de transporte avanzado y el espacio.
No obstante, existen aspectos comunes a los seis planes de cadena de valor que se orientan a cubrir necesidades de formación especializada y capacitación de los trabajadores, a explorar la expansión comercial a través de la apertura de nuevos mercados, la adaptación a la economía circular, la mejora de la eficiencia energética, la modernización de maquinaria, instalaciones y procesos, y la incorporación de la digitalización y de la automatización en sus procesos industriales.
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